La costa de Galicia ofrece numerosas opciones. Si quieres pasar un fin de semana relajado a la vez que disfrutas de paisajes únicos apuesta por Finisterre.
Los romanos creían que este lugar era el fin de la tierra, de ahí su nombre y su encanto. La propuesta que os hacemos es que os alojéis en su Faro. Un edificio reconvertido en hotel desde hace unos años. Éste faro ha sido testigo de innumerables naufragios de buques, lo que lo convierte en un lugar mítico y misterioso.
Reservar con tiempo porque, como os habréis imaginado, las habitaciones son limitadas, tan sólo hay 5. Claro que también cuenta con un restaurante y una cafetería que os permitirá disfrutar de las increíbles vistas del océano. Los precios además son tentadores. Una habitación individual cuesta entre 50 y 60 euros. Y una doble entre 90 y 110.
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