Financiación para vacaciones

Llega el verano y comienzan los planes para escaparse unos días de vacaciones. Llega el ocio, los viajes y el entretenimiento con amigos, familia y pareja, pero también los gastos.

Aunque cuentes con un puesto de trabajo, puede ser que tu salario no sea como para tirar cohetes y afrontar el pago de las vacaciones de una sola vez te puede descolocar todo. Vamos que: o pagas el paquete turístico o las cenas en el restaurante y alguna salida nocturna, pero no todo a la vez.

Qué puedes hacer

Financiación para vacacionesAnte esta disyuntiva, existe un camino intermedio que equilibra todo y te puede permitir disfrutar de las deseadas vacaciones: nos referimos a los minicreditos. No hablamos, por supuesto, de embarcarte en un préstamo personal que te suponga años en pagarlo. Estamos hablando de solicitar una pequeña cantidad, precisamente, para poder afrontar ese gasto puntual a lo largo del año que son las vacaciones.

Para explicarte esto un poco más en detalle, hemos echado un vistazo a dineritoahora.es, y hemos podido comprobar que, por unos bajos intereses, puedes conseguir ese dinero que necesitas y devolverlo de forma cómoda sin que eso perturbe mucho tu economía doméstica.

Qué son y cómo solicitar minicréditos

financiacion-para-vacacionesDentro del mundo crediticio hay muchos tipos de crédito: al consumo, hipotecas, líneas de crédito para empresas y otro tipo de préstamos más como los minicréditos. El concepto no es nuevo, pero en los últimos años se han convertido en una solución para trabajadores que prefieren demorar el pago de gastos como las vacaciones.

Además de ser muy sencillos de pagar en cómodas y pequeñas cuotas, se pueden solicitar de forma muy sencilla y conseguir el dinero en cuestión de minutos. Para poder acceder a ellos, sólo hay que cumplir una serie de requisitos: ser mayor de edad, contar con una forma de contacto y una fuente de ingresos demostrable.

Tras una evaluación por parte de la entidad financiera, una vez recibida la documentación, se aprueba la concesión del pequeño préstamo y el dinero se ingresa en tu cuenta bancaria. En la mayoría de los casos, esta gestión se realiza en el mismo día; para que veas lo cómodo y práctico que puede llegar a ser.

Por supuesto, pedir un minicrédito implica que sabes que puedes pagarlo. A partir de ahí, la ventaja de todo esto es que, a lo largo del año, puedes diversificar los pagos para, como ocurre en verano, tu cuenta bancaria no sufra un cargo excesivo que te mantenga alejado del disfrute del ocio y el entretenimiento hasta las navidades.