Viajar por placer es una de las actividades más satisfactorias de las que podemos disfrutar los seres humanos. Descubrir nuevas culturas, adentrarnos en civilizaciones lejanísimas en el tiempo o ampliar nuestro mundo es vital, son algunas de las ventajas que nos ofrece.
Sin embargo, para que podamos sacarle el mayor partido, una de las grandes ayudas puede ser concertar una visita guiada. Imagínate que viajas a Roma y quieres conocer hasta el más mínimo detalle del gran Imperio, contratando un tour de hellotickets.es del Coliseo te sentirás como el gran protagonista de la mejor superproducción de gladiadores. ¿Te lo puedes imaginar?
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Viajar en libertad, pero sin perder detalle
Cada día está más de moda viajar con total libertad, incluso a aquellos países de los que apenas tenemos referencia. Convertir nuestro viaje en una aventura imprevisible tiene su encanto, pero también es necesario que vayamos con ciertas precauciones y con un mínimo de conocimientos básicos.
Todos los países guardan importantes tesoros que debemos conocer. El patrimonio histórico y cultural sigue siendo la gran riqueza de la humanidad, por eso es imprescindible sumergirse en ella para poder ampliar nuestro punto de mira, creciendo en solidaridad y cercanía al resto de nuestros semejantes.
Ya lo dijo el escritor Emile Zola: «Nada desarrolla tanto la inteligencia como viajar». Pero deberíamos hacerlo de una forma consciente y sacándole todo el jugo a tan importante experiencia. Por eso, ante los grandes monumentos y acontecimientos, nada mejor que contratar un tour o visita guiada donde los expertos nos darán todos los detalles necesarios para informarnos al máximo.
5 Razones para contratar una visita guiada
1. Controlas tu tiempo
Las visitas guiadas suelen tener un tiempo determinado en el que, de una forma ordenada, vas a visitar todo lo necesario, además no tienes que hacer colas en taquillas ni para el acceso al recinto. De esta manera puedes organizarte el resto del día, acudir a otras visitas, dedicarte a descansar o lanzarte a la aventura por tu cuenta.
2. Lo aprendes todo
Desde el acontecimiento más asombroso hasta el detalle más nimio aparecen durante tu visita guiada. Incluso pequeñas interrogantes que te puedan surgir serán contadas de forma precisa pero, también, de manera amena. Los guías turísticos suelen ser profesionales de la misma localidad, por lo que su forma de expresarse resulta más cercana y entendible para todos. Además, siempre puedes pedirle que te informe sobre costumbres locales, lugares donde comer o qué otras cosas visitar.
3. Ahorras dinero
Una vez has contratado tu tour, todos los gastos están incluidos, tanto los honorarios del guía como la entrada, así como otras actividades que se puedan presentar durante la visita. De esta forma no te llevarás ninguna sorpresa.
4. Disfrutar en compañía
Por regla general, las visitas guiadas se realizan en pequeños grupos con el fin de que todos puedan acceder a la información y, al mismo tiempo, puedan aclarar sus dudas con el guía. Si vas con la familia y amigos resulta estupendo compartirlo con ellos, pero también tienes la opción de conocer nuevas personas a las que te une un interés común.
5. Puedes elegir las visitas que más te apetezcan
Antes de planear tu viaje es importante que hayas contratado las visitas guiadas que más te apetezca conocer, especialmente cuando se trata de ciudades en las que hay mucho donde elegir. Como es el caso de Roma, por ejemplo.
Ser prevenido puede ser la mejor opción para disfrutar de un viaje inolvidable y ya has visto que las rutas turísticas guiadas son una opción llena de ventajas.
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